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🎧 AudioQuin ✅ Un Amor Imposible

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Grandes secretos en una pequeña localidad
Noah Cooper había llegado a Kerry Springs para hacer un trabajo y, como ránller de Texas, no podía permitirse ningún tipo de distracción. Por eso, era una pena que en el centro del misterio estuviera la irresistible Lily Perry.
Lily estaba decidida a seguir siendo una madre soltera, así que tener a un inquilino tan atractivo como Noah en su casa no le parecía buena idea. Era encantador con los niños… ¡y ella solo pensaba en besarlo! Con todos los secretos que había entre ellos, ¿podrían alguna vez confiar el uno en el otro?


Resumen...

Noah Cooper bajaba en su coche por Maple Street cuando vio el cartel de Se alquila delante de la casa victoriana de tres pisos. Subió al pequeño porche, vio que la puerta estaba entreabierta y oyó música. Asomó la cabeza y vio una sala con una chimenea de ladrillo. En la pared de enfrente había una hilera de armarios, una mesa y dos sillas.

Una mujer estaba a gatas fregando el suelo al ritmo de una canción country. El pelo, castaño con mechones dorados, estaba recogido en un moño en lo alto de la cabeza, pero casi todo se le había soltado. Lily oyó que la llamaban, miró por encima del hombro y vio a un desconocido. Dio un respingo y casi se golpeó la cabeza contra la mesa.
Soltó un improperio y levantó una mano para detenerlo cuando vio que el hombre se acercaba a ella. Era alto, delgado, con el pelo moreno, tupido y ondulado y unos ojos de color whisky. Me llamo Noah Cooper. Me llaman Coop.

Él señaló hacia el cartel con la cabeza. Lily se encogió de hombros. El niño de cinco años entró como un rayo por la puerta de la casa. Ella le apartó el pelo rubio que le caía por la frente y él la miró con esos ojos azules tan parecidos a los de su padre.
Todavía sentía una opresión en el pecho al acordarse de aquellos tiempos y de un padre que el niño no había conocido. Lily quiso sonreír. Yo soy Robbie Perry. Todo el mundo me llama Coop.
El niño miró a su madre y luego al desconocido. Está protegiendo a su madre. Robbie arrugó la frente. Lily notó que se ponía roja por la mentirijilla, que estaba agrandándose.

Lily se encontró sin otra elección y asintió con la cabeza. El niño levantó un puño y salió corriendo. Se hizo un silencio incómodo, hasta que Coop lo rompió. Gracias, señora Perry.
Coop se dio cuenta de que Lily Perry desconfiaba de él, pero no le extrañó que recelara de los desconocidos después de todo lo que había pasado durante los meses anteriores. Coop se marchó e iba por el camino cuando el niño salió corriendo de la casa principal y bajó los escalones del porche como un torbellino. Cortan trozos de camisas viejas y otras cosas para hacer colchas. Le niño se quedó pensativo.

Coop observó al niño que iba corriendo hacia el coche que lo esperaba. Vocifero en silencio al hombre que le había hecho aquello a esa familia. Michael Perry tenía una esposa muy guapa y dos hijos. Su cometido era descubrir qué había detrás de la muerte de Perry.
Treinta minutos más tarde, Coop había encontrado Puntada con Hilo en la calle principal. Abrió la puerta y entró. La tienda estaba bien puesta y se encontró con estantes llenos de telas de todos los colores y con colchas de retazos hechas a mano que adornaban las altas paredes. Una mesa grande para cortar telas estaba ocupada por algunas clientas que esperaban su turno.

Son las mujeres del rincón de las costureras. Coop resopló, se quitó el sombrero, sonrió y se dirigió hacia la mesa. La media docena de mujeres, de distintas edades, dejaron de hablar y lo miraron fijamente. Siento interrumpirlas, pero estoy buscando a la señora Beth Staley.
Las demás mujeres se rieron y Coop se relajó un poco. Beth sonrió y él captó el parecido con su hija. Tenían los mismos ojos de color zafiro y la misma forma de cara. La mujer miró fugazmente a sus amigas y volvió a mirarlo a él.

La señora Staley pareció no entenderlo. Coop asintió con la cabeza. Señoras, Noah Cooper va a ser mi nuevo inquilino. Todo el mundo se dio la vuelta y vio a Lily Perry que se acercaba al grupo.
Él nunca se habría imaginado que tenía treinta y tantos años y dos hijos. Quiero presentarte al señor Cooper. Él me dijo dónde encontrar a la señora Staley. La mujer frunció el ceño.

Madre, no deberías haber aceptado a ese hombre de inquilino sin comprobarlo todo antes. Además, creía que habíamos acordado alquilársela a una mujer. Me dejó en la estacada con mis hijos y me quitó hasta el último céntimo. Empieza una vida nueva con tus hijos.
Lily no quería volver a darle vueltas al asunto en Puntada con Hilo. Miró al atractivo Noah Cooper, que estaba hablando con las mujeres de la mesa. Entonces, de la noche a la mañana, las cosas se torcieron entre ellos y la abandonó con sus hijos. Se oyó un lamento y todo el mundo se dio la vuelta hacia Jenny, que estaba doblada por la mitad.

Jenny negó con la cabeza. Lily miró a Jenny, que daba órdenes aunque todo el mundo parecía alborotado. Millie, llama a Jade y dile que Jenny está dando a luz. Nadie dijo nada hasta que Noah Cooper habló.
Jenny gruñó al sentir otra contracción. Lily pasó un brazo alrededor de Jenny y Liz la agarró por el otro lado para llevarla hacia la puerta. Su madre acompañó a Coop. Aceleró el paso, abrió la puerta del acompañante y Millie puso una toalla en el asiento.

Jenny se disculpó por el follón. Lily y su madre se montaron detrás y le indicaron el camino al hospital. Lily esperó poder dejar de dar instrucciones cuando llegaran, lo cual sería muy pronto a juzgar por la forma de conducir del señor Cooper. Dos horas más tarde, Noah estaba bebiéndose la segunda taza de café de hospital y el bebé no había llegado.

Él se habría marchado, pero no sabía cómo podrían volver a sus casas el resto de las mujeres. Al parecer, Jenny Rafferty era muy querida. Según Beth, Evan Rafferty, el marido de Jenny, era ranchero y propietario de un viñedo. Sean Rafferty, el padre de Evan, entró en la sala de espera con Gracie, su nieta de diez años e hijastra de Jenny.

Sean Rafferty captó la atención de todas las mujeres. Se arremolinaron alrededor del hombre como si fuese una estrella de rock. Beth le contó que Sean era el soltero más codiciado del pueblo dentro de esa franja de edad. Coop se fijó en Lily Perry, quien estaba hablando por teléfono al otro lado de las puertas batientes.

Recordó cuando la vio dando órdenes a todo el mundo. Era una mujer fuerte y decidida. La puerta volvió a abrirse y su nuevo empleador, Alex Casali, entró con una atractiva pelirroja. Era Allison Cole Casali, su esposa.
Alex lo vio y se acercó a él. Era el único que tenía un vehículo para traer a Jenny al hospital.


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